porque en eso se
quedó,
él prefirió ser
el caudillo,
de un pueblo que jamás
le llamó.
De Galicia se fue
a Marruecos,
y de Marruecos se
alzó hasta Madrid,
matando hombres,
mujeres, niños y viejos,
porque del
Fascismo él era Adalid.
Soberano por la
gracia de Dios,
y a través del
miedo y del terror,
gobernó hasta que
su aliento dijo adiós.
Así de majo era
"el Paquito del Ferrol"
Qué triste es
leer como era España,
y ver como la has
dejado, canalla.